Es importante que la ruta vaya a salir bien, por lo que antes de la partida hay que decidir que comida se va a llevar, la cantidad de agua que se va a necesitar y si es necesario ropa de abrigo. Es muy importante adaptar la duración y la distancia de recorrido al nivel físico de los participantes. Es preciso dosificar el esfuerzo para ir gradualmente aclimatándose a la frecuencia cardíaca (que aumenta con la altitud).
Más que la distancia, se tomará como referencia el desnivel. En una hora, un senderista de nivel medio puede ascender unos 300m de desnivel, y descender unos 500m. Es de gran ayuda realizar una breve pausa de 10min cada hora, para recobrar el aliento e hidratarse.